Me estremece
sentirte,
mecerte,
adivinarte,
merecerte,
acompañarte.
Me turba
abrazarte,
inabarcarte,
esperarte,
preterirte,
postergarte.
Me entusiasma
pensarte,
escucharte,
elucubrarte,
redescubrirte,
investigarte.
Y después
del encuentro
volveremos
a hacer
los demás
quehaceres
que son los mismos
de antes
pero que ahora
me asombran
enfocándolos
de otra forma.
¡¡¡Por fin!!!
Ya soy
también
en otra.